sábado, 17 de mayo de 2025

Mujica

 Fui uno de los primeros opinadores de barrio que comentó la honestidad intelectual del Pepe cuando confesó en el libro "Coloquios" el fracaso total de la revolución guerrillera y la necesidad de aceptar a la socialdemocracia por los próximos doscientos años. Él tuvo el mérito de llevar al Frente hacia la democracia y abandonar sin pena la teoría del foco guevarista. También advirtió la dificultad de juntar verdad y justicia por el mismo rabo, y predicó el mutuo perdón. Admirable fue su prédica sobre la austeridad anticonsumista y lo mostró en su vida (aunque despilfarró alguna plata del Estado en aventuras colectivistas fracasadas). Lo único que me impide ver a Mujica como un referente o un modelo es su falta de honestidad intelectual cuando dice hasta sus últimos días que se levantó en armas para atajar un golpe de Estado o derrotar una dictadura. Eso no es cierto, porque yo lo viví: con su accionar provocó, aceleró, alentó el Golpe, y los jóvenes de hoy que lo adoran no lo saben (o no les importa). A mí sí.